El estreno de Harry Potter y el Príncipe Mestizo, se anunciaba desde antes que comenzaran las vacaciones de invierno de los escolares y yo comenzaba a juntar ganas de ir, pero sin planificar el día. El jueves feriado fue el estreno y yo descansando de una gripe que recién comenzaba a abandonarme. Viernes ya de vuelta al trabajo, y en medio de una conversación telefónica, veo una mano acercarse a mi con dos boletos de regalo por buen desempeño, para el cine hoyts, abiertos para la función que quisiera y que solo debían ser validados en la boletería.
Entonces, con Publimetro en mano, me puse a buscar a que hora comenzaba la función de la tarde y me fui directamente al Hoys de San Agustín en calle Moneda, para la función de de las 17 horas. Hice la fila de 15 minutos o más para los ticket y otra media hora en otra fila para entrar. La sala 3 estaba llena de adolescentes y adultos, y entonces junto a las 17 horas, comienza la acción.
La historia comienza con velocidad desde el primer cuarto de hora, la historia se muestra más oscura que antes, y me entretuve identificando los códigos entregados en los libros anteriores. Con los mismos protagonistas de las películas anteriores, pero esta vez más grandes, con historia de romance para todos y con un final inesperado para quien no es fanático de la historia. Más de dos horas de efectos especiales, que luego nos conduce a un final abierto, expectantes para la próxima película.
Para el sábado en la mañana en portada de las últimas noticias “PotterManía” y yo con sonrisa de oreja a oreja, de haber sido parte de la estadística.
Entonces, con Publimetro en mano, me puse a buscar a que hora comenzaba la función de la tarde y me fui directamente al Hoys de San Agustín en calle Moneda, para la función de de las 17 horas. Hice la fila de 15 minutos o más para los ticket y otra media hora en otra fila para entrar. La sala 3 estaba llena de adolescentes y adultos, y entonces junto a las 17 horas, comienza la acción.
La historia comienza con velocidad desde el primer cuarto de hora, la historia se muestra más oscura que antes, y me entretuve identificando los códigos entregados en los libros anteriores. Con los mismos protagonistas de las películas anteriores, pero esta vez más grandes, con historia de romance para todos y con un final inesperado para quien no es fanático de la historia. Más de dos horas de efectos especiales, que luego nos conduce a un final abierto, expectantes para la próxima película.
Para el sábado en la mañana en portada de las últimas noticias “PotterManía” y yo con sonrisa de oreja a oreja, de haber sido parte de la estadística.
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